Una vez que conozca tu problemática te recomendaré la frecuencia con la que sería apropiado que tengas una sesión. En la mayoría de los casos, se sugiere tener una sesión semanal, por lo menos los dos primeros meses de terapia. Sin embargo, finalmente serás tú quien decida la frecuencia con la que acudirás a terapia. Aun así, es importante que sepas que el cumplimiento de la frecuencia terapéutica es primordial para garantizar el éxito de tu proceso terapéutico y el cumplimiento de objetivos.
La duración de la terapia depende del problema y de la persona. Trabajo de forma eficaz y basada en evidencia científica para avanzar rápidamente. Aunque es común sentir alivio a corto plazo, no existen soluciones mágicas; la terapia requiere continuidad.
No, en absoluto. Los psicólogos estamos obligados por Ley y por nuestro Código Deontológico, a mantener el secreto profesional y ofrecer una garantía total y absoluta de confidencialidad.
Si en algún momento coincido contigo en algún evento o lugar no mencionaré que te conozco porque estás haciendo terapia conmigo, con el fin de preservar tu anonimato y confidencialidad.
Podrás cambiar la fecha o anular la sesión con una antelación mínima de 24h. Si avisas con menos de 24h no se aceptarán cambios y la sesión quedará anulada teniendo que hacer el pago del 50% de la sesión perdida antes de la siguiente cita.
El primer contacto conmigo es gratuito, se llevará a cabo a través de una llamada telefónica en la que te preguntaré tu motivo de consulta, te contaré como trabajo y valoraré si soy la persona más adecuada para atenderte. La primera sesión psicoterapéutica, así como las siguientes tendrán un coste. Empezaremos el trabajo terapéutico desde la primera sesión.